JUSTICIA CLIMÁTICA                                11-11-2022

 

Vuelvo a la carga con la rabiosa actualidad .  Nada más importante que la Cumbre del Clima que se está celebrando en Egipto, la número 27 , que ya el número quiere decir algo.  Ojalá se cumplan las buenas iniciativas y promesas que , sin lugar a dudas , se formularán en Egipto. Necesitamos confiar. Pero no sólo eso. Hay que exigir más que confiar. Exigir que   las posibles soluciones vengan no solo de los cambios de comportamientos de los más acomodados y derrochadores del Planeta sino  de las manos de las políticas  públicas y de los planes gubernamentales. Con la ciudadanía como vigilante.  Porque lo que  tenemos entre manos es demasiado importante como para dejarlo sólo en mano de los políticos. El mensaje central es claro: a menos que se produzcan reducciones inmediatas de las emisiones de gases de efecto invernadero en todos los sectores y regiones, el objetivo de 1,5 °C está fuera de la realidad. Si el panorama es terrorífico para esta generación, imaginemos cómo será  para las siguientes.

 

El secretario General de la ONU, Guterres ha hablado claro sin pelos en la lengua. " Si la actividad humana es la causa del problema climático la  acción humana debe ser la solución” . Acción para cambiar nuestros estilos de vida derrochadores aquí en el Norte desarrollado y  justicia climática para ayudar a los países del Sur que , sin capacidad para contaminar pagarán injustamente el pato. Un asunto crucial , ha advertido el secretario general de la ONU:  la colaboración económica de los países desarrollados y más contaminantes para que los países en desarrollo adapten sus economías al cambio climático.

 

Pero Guterres no sólo ha apelado a las personas y a los gobiernos.  También ha puesto el foco en las compañías petroleras y energéticas  que han llevado a la humanidad a situarse cerca del abismo climático. "Pido que todos los gobiernos cobren impuestos sobre las ganancias extraordinarias de las empresas de combustibles fósiles. Redirijamos el dinero a las personas que luchan contra el aumento de los precios de los alimentos y la energía y a los países que sufren pérdidas y daños causados por la crisis climática", ha reclamado.

 

Uno de los mejores escritores daneses vivos, Carsten Jensen, en su carta “El último discurso que di antes de convertirme en un criminal” nos  regala un texto lleno de fuerza y de emoción que viene muy a pelo con todo lo anterior. El texto es una   enumeración que irá ganando aún más potencia y resonancia con los años, a medida que el eco de nuestros presumibles silencios retumbe irremediablemente en nuestros oídos. He aquí algunas perlas del discurso: 

“Si crees que puedes vivir como siempre has vivido, te equivocas”.

“Si crees que tus hijos tendrán una vida como la tuya, te equivocas”.

“Si crees que los problemas de hoy se resolverán solos mañana, te equivocas.

“ Si crees que hay alguien que salvará al mundo por ti , te equivocas.

“Si crees que aún queda mucho tiempo, te equivocas.

“Si crees que la paciencia del planeta es infinita porque ha soportado la presencia de tu especie durante unos cientos de miles de años, te equivocas”.

Estas son solo algunas frases del texto que hizo público antes de ser detenido en una acción de protesta.  Pueden leer el texto completo en internet como yo he hecho.

No les canso más. O sí, puede que sí.