CRUZCAMPO ( 19-02-2021)

Quizás hayan podido ver y escuchar un anuncio de la Junta de Andalucía  a propósito de la conmemoración  del 28F. El video en cuestión  no ha pasado desapercibido y somos muchos los que  hemos mostrado nuestro malestar ante lo que entendemos como un menosprecio a Andalucía .Sin acento andaluz, sin la verde blanca y verde, y sin andaluces ni andaluzas.

El video ha introducido voces no andaluzas, imágenes no todas andaluzas, compradas en un banco multimedia   y ausencia de símbolos andaluces como la bandera andaluza. La que sí sale es la española.  Toda una declaración política. Todo conduce a pensar que ,aunque lo firma la Junta, sin duda han sido los guardianes de la extrema derecha que vigila desde fuera al gobierno andaluz y persigue todo lo que suene a identidad de los pueblos de España quienes han impuesto sus ideas y han negado las nuestras. Penoso y deplorable. Hay que ser muy provocador  para pretender conmemorar el Día de Andalucía con un video como este. 

Estamos en 2.021 y , desgraciadamente, las instituciones que tienen el deber de defensa  de nuestra historia pero también de nuestro futuro,  no siempre están a la altura que debieran como a mi juicio este video deja claro. Es sólo un vídeo, me dirán, pero es sintomático del concepto y del poco respeto al legado y cultura del pueblo andaluz.

Por fortuna se ha difundido estas semanas   otro anuncio o spot televisivo de una  marca de cervezas llamada Cruzcampo que ha conseguido el objetivo que persiguen los anuncios, que no es otro que emocionar y conseguir que la gente le siga. Es decir, la Cruzcampo , que de tonta no tiene un pelo,  sabe que no se vende lo que no emociona. Cruzcampo en ese anuncio no vende una cerveza, sino una forma de estar en el mundo, una experiencia,  un estilo de vida, una manera de ser y de vivir. Vende como estilo de vida lo andaluz porque la identidad andaluza no es conflictiva como otras identidades. Y en eso consiste el éxito del spot.

Parece mentira que una empresa entienda mejor lo que significa Andalucía que sus propias instituciones políticas. Aunque su móvil sea mercantil. También la política mercantilea con los votos de sus ciudadanos y convierte el marketing en la principal estrategia electoral pervirtiéndolo casi todo. 

En cierto modo se puede decir que lo andaluz está de moda. Sin embargo ,este éxito  no se traduce en un proyecto que haga de lo andaluz una identidad política. ¿ Por qué? Pues porque  la realidad andaluza no está relacionada con sus esencias identitarias sino con la  desigualdad social y de retraso relativo con respecto a otros territorios de España. La identidad andaluza no es nacional, es social. No es excluyente, es inclusiva. Defiende lo propio, no niega al diferente. Nace de la empatía no del egoísmo. La letra de su himno lo dice bien claro : “ sea por Andalucía libre, España y la Humanidad” .

Esta realidad la comprende Cruzcampo a la perfección y la ha plasmado en un anuncio magistral que debe pasar a la historia de la publicidad. A ninguna marca de cerveza  se le ocurriría hacer un anuncio fomentando la catalanidad o el vasquismo. No lo hacen porque saben que su producto no tendría éxito fuera de sus respectivos territorios . Sin embargo, lo andaluz no tiene fronteras porque su identidad no necesita de la confrontación para ser y existir.

El andalucismo es la lucha de clases con acento andaluz. O lo que es lo mismo, es la lucha contra la desigualdad, en cualquiera de sus formas, y no la reivindicación esencialista de una patria y un territorio. Por eso, cualquier propuesta política que quiera ser hegemónica en Andalucía tiene que ver varias veces el anuncio de Cruzcampo. La identidad andaluza no genera conflicto porque está acabada. Y  la fortaleza de una identidad que se siente tan segura de sí misma que no necesita competir es el gran éxito de lo andaluz.

Por eso puede aparecer en un anuncio, porque vende dentro y fuera, porque lo andaluz se reconoce y se difunde, no se oculta como hace el video de la Junta de Andalucía.  La identidad andaluza es tan sólida que cabe en un anuncio de cerveza. Saber celebrar las victorias puede ser  también revolucionario.

                                    Enrique Monterroso Madueño