EUTOPÍA ( 9-07-2021)
Deliberadamente no pretendo hablar de chuletones
al punto. En política , como en otros géneros de la vida, hay cosas que tocan y
cosas que no tocan. Y , en mi opinión, el tema del consumo de carne no toca
ahora. Y , sobre todo, no toca así, frívolamente, en plan sálvame de luxe lanzándolo
a la vorágine estival que todo lo traga pero sin digerir. Quiero decir que no
se puede echar sin más a las fauces de buena
parte de la ciudadanía- que en estos
momentos o está en bañador o de botellón- un tema de calado en su triple vertiente: la de la salud , la de la economía y la del
medio ambiente, sin darle una pátina al menos de seriedad, de cientificidad,
sin provocar reflexiones críticas acompañadas de conocimiento debido pensando
en propiciar cambios en los paradigmas respectivos tanto en
su relación con la sostenibilidad como
de la salud o de la economía. Como no se ha hecho así, yo más bien creo que el
objetivo de este lanzamiento veraniego es servir de cortina de humo para algo, ser serpiente de verano, un espot publicitario.
Lo que sí toca ahora es recordar que muy pronto se cumplirá el 50
aniversario del Informe del Club de Roma sobre los límites del crecimiento del
planeta que decía – muy resumidamente- una cosa muy sencilla y fácil de
comprender : que el crecimiento ilimitado en un medio limitado es imposible. Es
decir , que el consumo sin límites, como si fueran inagotables, de todo tipo de
bienes por parte de la población del planeta siendo La Tierra un medio limitado
es sencillamente inviable, no ya por razones ecológicas , medioambientales o ideológicas
sino por las propias leyes físicas de la
naturaleza. Y advertía ya en 1.972 que, de
no frenarse la tendencia al crecimiento exponencial de la economía, los ciclos
naturales básicos se desestabilizarían y
pondrían en riesgo la propia supervivencia de las especies , incluida la humana.
Pues bien , ya desde fines del siglo pasado, hemos rebasado todos
los límites que señalaba el Club de Roma, a juicio del mundo de la ciencia. Y
no porque la población humana haya crecido tanto que sea una amenaza cierta
para el planeta. Está demostrado que el planeta puede sostener perfectamente a
la población actual y asumir un mayor crecimiento. Lo que el planeta no puede
admitir es el estilo de vida de unos
cuantos. Decía Gandhi que “ En la Tierra hay suficiente para satisfacer las
necesidades de todos; pero no tanto como para satisfacer la codicia y la
avaricia de algunos”.
Una científica y ecologista española -Yayo Herreros- viene manteniendo
hace tiempo que “ Los estilos de vida
actuales –asimétricos y desiguales– están colapsando las funciones
ecosistémicas y agotando los bienes no renovables sobre los que se apoya la producción
de bienes y servicios y la regeneración de los sistemas vivos. Las
posibilidades de crecimiento en un “mundo lleno” se ven seriamente
comprometidas.” Hasta el punto , según
ella , de que el progreso material ilimitado es una fantasía, por no
decir una utopía y habría que afrontar el decrecimiento, reducir consumos,
energía, recursos de todo tipo. Evidentemente esto del decrecimiento habría que
plantearlo debidamente y no en un simple picotazo de un colaborador de la SER un
viernes de julio y para que no pase como
con lo de la carne de vaca y sus flatulencias.
Precisamente en Marbella tenemos una especie de burbuja que pretende practicar
la coherencia entre lo que defendemos a
nivel verbal y lo que hacemos a nivel real. Se trata de Arboretum, una
Fundación y Asociación sin ánimo de lucro que impulsa proyectos saludables y sostenibles,
con la vista siempre puesta en crear comunidad , compromisos, tejer redes y no sólo ofrecer palabras y retóricas vacías.
Uno de esos proyectos es EUTOPÍA. ¿ Qué quiere decir Eutopía? Es una palabra
que viene del griego y significa un buen lugar al que ir, al que dirigirse , al
que aplicarse. Más que un lugar para
sestear desentendiéndose del mundo en que vivimos , es un lugar al que llegar .
Desde ese sentido, a mí me sugiere a la
Itaca de Ulises a la que cantaba Kavafis
Ten siempre a Itaca en tu mente. Llegar allí es tu destino. Mas no
apresures nunca el viaje. Mejor que dure muchos años y atracar, viejo ya, en la
isla, enriquecido de cuanto ganaste en el camino, sin esperar a que Itaca te
enriquezca. Itaca te brindó tan hermoso viaje. Sin ella no habrías emprendido
el camino. Pero no tiene ya nada que darte.
¿ Y a qué se dedica el
proyecto Eutopía de Arboretum, en qué consiste ese viaje particular a Itaca? Básicamente
a trabajar la tierra y a agradecerla , a disfrutarla, a repensar nuestro estilo
de vida, a educarnos, a conocernos a nosotros mismos. Demasiado, no? Pues no, porque
todo ello se practica con humildad.
Así que olvídense del chuletón al punto y piensen en Eutopía, en
Itaca.
Gracias por estar ahí. Seguirá. Buenas tardes
Enrique
Monterroso Madueño
No hay comentarios:
Publicar un comentario